En marzo, nuestra oficina regional en la capital, Dakar, que coordina las operaciones regulares en otros países de África occidental y central, se movilizó para asistir en la respuesta a el COVID-19 en Senegal.
Iniciamos actividades en el barrio sin recursos de Guédiawaye, en el norte de Dakar, y colaboramos con organizaciones nacionales y regionales para prepararnos para un aumento de los casos graves y para mejorar la comunicación en torno al virus. Estas actividades prosiguieron hasta finales de septiembre, cuando observamos una reducción clara tanto en la transmisión del virus como en la gravedad de los casos.
En el Hospital Dalal Jamm de Dakar, colaboramos con un centro de tratamiento de el COVID-19, de 200 camas. Cuando comenzamos a observar un aumento en los casos graves, incrementamos la capacidad de oxigenoterapia. También trabajamos para mejorar el manejo de pacientes y las medidas de prevención y control de infecciones.
Además, dirigimos actividades de participación comunitaria y promoción de la salud en todo el distrito en Guédiawaye. Colaboramos con el equipo nacional de respuesta en las actividades de prevención en las comunidades, donde difundimos mensajes para combatir el miedo, la desinformación y el estigma que rodeaban al virus. La vigilancia comunitaria fue un componente fundamental de la respuesta; nuestro equipo de epidemiología trabajó con otras entidades nacionales y regionales para reforzar la vigilancia de casos, y colaboró en el análisis de datos para entender mejor la evolución de la epidemia.
La experiencia adquirida en este primer proyecto en Senegal se implementó en nuestros proyectos de respuesta a el COVID-19 en otros países de África occidental y central, como Camerún, Níger y Burkina Faso.