Tres de cada cuatro fallecidos son niños. Con 310.000 casos diagnosticados solo en 2019, se trata del peor brote de los últimos diez años en el país y el mayor actualmente activo en todo el mundo.
Noviembre es el mes del noma: buscamos crear conciencia sobre esta enfermedad que, tratada a tiempo, tiene cura. Además, trabajamos para que las comunidades comprendan mejor esta enfermedad poco conocida y las personas con noma no sean discriminadas.
La arquitecta y artista Camille Quilichini cuenta algunas de las historias dentro de los proyectos en los que trabajó con Médicos Sin Fronteras, en Sudán del Sur. Sus obras calcan el día a día del único hospital que presta atención en una región de 1.5 millones de habitantes.
En lo que va del 2019 más de 145.000 personas se infectaron y 2.758 murieron a causa de la epidemia de sarampión en la República Democrática del Congo (RDC). Es la más mortal que ha experimentado el país desde 2011-2012.
Se necesita una movilización masiva urgente de todas las ONG para detener el brote. Estamos haciendo todo lo posible y vacunando rápidamente, pero algunas familias han perdido ya “dos, tres o incluso cuatro niños”.
Médicos Sin Fronteras (MSF) respondió al brote de sarampión reportado en Vakaga, noreste de la República Centroafricana, a escasos kilómetros de la frontera con Chad y Sudán y a 700 de Bangui, su capital.
Miles de niños corren el riesgo de contraer sarampión en el noreste de Nigeria. Hemos vacunado a casi 3.000 niños contra esta enfermedad potencialmente mortal, sin embargo, el número de casos en abril fue cuatro veces mayor que en enero, y las salas de nuestros hospitales están llenas.