El martes 28 de octubre de 2025, el devastador huracán Melissa azotó Jamaica, provocando inundaciones y una destrucción generalizada. El huracán arrasó Cuba el miércoles 29 de octubre y actualmente afecta a Haití y otros países de la región.
«Lamentamos profundamente la trágica pérdida de vidas y la destrucción causada por el huracán Melissa, y manifestamos nuestra solidaridad con todas las personas afectadas”
Brice de la Vigne, jefe de la unidad de emergencias de Médicos Sin Fronteras (MSF).
Nos estamos preparando para asistir ante el huracán Melissa
El aeropuerto de Jamaica está cerrado actualmente, pero desde MSF nos estamos preparando para enviar equipos de emergencia especializados en atención médica, logística, agua y saneamiento.
También estamos preparando suministros para enviarlos una vez que el aeropuerto vuelva a abrir. Así podremos brindar a la población atención médica general y artículos esenciales. Nos preparamos para enviar botiquines, artículos no alimentarios y materiales críticos para el suministro de agua potable, según las necesidades identificadas.
¿Cuál es la situación en Haití tras el huracán Melissa?
El huracán también ha provocado inundaciones y daños en Haití, donde gestionamos actividades médicas. Si bien nuestros equipos no han detectado necesidades significativas a causa del huracán Melissa, en Puerto Príncipe nuestra principal preocupación es la posibilidad de lluvias torrenciales.
Nuestros equipos están preparando medidas de contingencia para asegurar el suministro de equipos y medicamentos para nuestros proyectos en curso, en caso de que haya inundaciones. Seguimos preparados para responder en otras partes del país si fuera necesario.
Nos comunicamos con las poblaciones afectadas
Nuestros equipos están en contacto con la población de los países afectados por el huracán Melissa para comprender sus necesidades más urgentes.
Si bien no estamos presentes en algunos de los países afectados, nuestra experiencia de más de 50 años respondiendo a emergencias nos indica que la población tendrá necesidades inmediatas de alimentos y refugio, así como atención médica.
Los desastres pueden afectar la continuidad de la atención médica y el acceso de las personas a medicamentos esenciales para enfermedades no transmisibles y otras afecciones.
Este desastre, en particular, pondrá de manifiesto la necesidad de atención a la salud mental. Asimismo, es fundamental que las personas tengan acceso a agua potable para prevenir brotes de enfermedades transmitidas por el agua.
Desde MSF seguimos evaluando el impacto de este desastre en las comunidades de otros países de la región.
 
	 
		 
		