En la noche del 18 de abril, un hombre armado con uniforme militar asesinó a tiros a un miembro de nuestro personal en su casa en Masisi. El ataque ocurrió en Kivu Norte, al este de la República Democrática del Congo (RDC), una región gravemente afectada por la violencia.
El fallecido, enfermero del hospital general de referencia de Masisi, es el segundo miembro de MSF asesinado en esta ciudad en los últimos dos meses. También es el tercer trabajador abatido en Kivu Norte en lo que va del año.
Horas antes, esa misma noche, dos hombres armados con uniformes militares y rifles de asalto atacaron y robaron a civiles en Masisi. Luego, irrumpieron en la casa del enfermero para asaltar a los residentes. Durante el incidente, los atacantes abrieron fuego y dispararon dos veces en el pecho al enfermero, causándole la muerte.
“Condenamos enérgicamente este acto terrible, que le costó la vida a nuestro colega y refleja la grave degradación de la situación de seguridad que hemos observado en Kivu Norte y Sur desde comienzos del año. Semana tras semana, nuestros equipos no solo son testigos, sino también víctimas de actos violentos contra civiles, trabajadores humanitarios y centros médicos. Esto debe terminar de inmediato”.
Emmanuel Lampaert, representante de MSF en RDC.
Testigos y víctimas de la escalada de violencia en Kivu Norte
Desde principios de 2025, los equipos de MSF en la región presencian incidentes violentos casi a diario. En múltiples ocasiones, grupos armados atacaron directamente a nuestro personal.
En apenas cuatro meses, grupos armados asesinaron a tres trabajadores de MSF a tiros en Kivu Norte. Algunos fueron atacados mientras ejercían su labor y otros como víctimas de ataques a civiles.
El 20 de febrero, combatientes de VDP/Wazalendo y M23/AFC mataron a un operador de radio de MSF durante un fuego cruzado en la base central de Masisi.
Días después, hombres armados asesinaron a otro compañero en su casa de Goma durante la noche. En los últimos meses, otros miembros del personal resultaron heridos de bala; el más reciente permanece hospitalizado en Goma.
“Incluso en zonas donde los enfrentamientos armados han cesado, la inseguridad persiste en todas partes. Además de la violencia armada que afecta directamente a nuestros hospitales y bases, somos testigos de niveles alarmantes de criminalidad e incidentes violentos recurrentes contra la población civil, especialmente durante la noche: asesinatos, violencia sexual, heridas de bala, extorsiones, invasiones de domicilios, intimidaciones y más”.
Mathilde Guého, responsable de programas de MSF en Kivu Norte.
Ante esta serie de incidentes violentos —de los cuales, alrededor de 15 afectaron directamente a equipos, ambulancias, oficinas e instalaciones sanitarias apoyadas por MSF desde enero—, hacemos un llamado urgente.
Solicitamos a las autoridades competentes que se responsabilice a quienes portan armas y que se tomen medidas urgentes para garantizar la seguridad de la población civil y del personal humanitario.
Además, reclamamos acciones concretas para combatir la criminalidad y poner fin a los abusos que sus equipos presencian a diario.
“Recordamos a todas las partes -M23/AFC, VDP/Wazalendo, FARDC- que la protección de la población civil y de sus bienes en contextos de conflicto es una obligación legal. Todas las autoridades pertinentes deben actuar de manera urgente para cumplir con esta responsabilidad”, concluye.
Emmanuel Lampaert, representante de MSF en RDC.
